sábado, 30 de agosto de 2008

SELECCION DE POEMAS A OAXACA

Poema Valle De Oaxaca
de Eduardo Zambrano

Ni la vieja gloria de los maravillosos imperios
se ha salvado.
Ni el orgullo de las catedrales,
ni siquiera el remanso de la fe en los monasterios
compiten con esa otra arquitectura de cerros y nubes en el Valle de Oaxaca.
El tiempo gasta la dura piedra y se desmorona la realidad.
El viento no dice palabra,pero los follajes de los grandes árboles
parecen conversar aún con las nubes.
En estas tierras es evidente que solo los sueñosperduran.


Oaxaca
A Amay Rany
llenó de luces la raíz profunda
estiró sus ramas hasta el cielo
el barro negro se pegó a su piel
y en nativa lengua pronunció tu nombre
amay rany rany amay
y la magia se volvió silencio
y patria tu piel reconquistada
Oaxaca el nido fabricado con tus alas
y con el sueño de azorados ojos
despides mis aguas al caudaloso río
sin romper distancia....

SERGIO HERNANDEZ GIL

viernes, 29 de agosto de 2008

FIESTA DE MUERTOS

México entre la bruma fiesta de muertos en la zona mixe.

Ayutla, a despecho del tiempo, mantiene tradiciones prehispánicas debido al aislamiento en que la tuvo su accidentado terreno.

Texto: Ma. Cristina Suárez y Farías

Ayutla, a despecho del tiempo, mantiene tradiciones prehispánicas debido al aislamiento en que la tuvo su accidentado terreno.Rodeada de montañas, entre espesa niebla y bosques de coníferas, se encuentra Ayutla, población mixe donde la fiesta de muertos se celebra de manera muy peculiar.Entre las profundas cañadas formadas por el nudo del Zempoaltepetl en el noroeste del estado de Oaxaca, habitan los mixes, etnia cuyos usos y costumbres están impregnados de la más profunda tradición. Salvo unas pocas excepciones, los pueblos mixes están situados sobre cumbres y riscos de marcada pendiente con elevaciones sobre el nivel del mar que fluctúan entre 1 400 y 3 000 m. Las condiciones del terreno y los ríos impetuosos dificultan las comunicaciones en esta región que consta de 17 municipios y 108 comunidades, siendo las más importantes Cotzocón, Guichicovi, Mazatlán, Mixistlán, Tamazulapan, Tlahuitoltepec, San Pedro y San Pablo Ayutla y Totontepec.La primera incursión española en territorio mixe la llevó a cabo Gonzalo de Sandoval en 1522, y posteriormente el área fue escenario de sucesivas invasiones, una de las cuales provocó la confederación de todos los pueblos de la región: mixes, zoques, chinantecos y zapotecos. Hacia 1527 los indígenas fueron vencidos por los españoles después de sangrientas batallas, y este hecho marcó el comienzo de su dominio sobre la zona mixe. Sin embargo, los misioneros tuvieron más éxito que los soldados y hacia 1548 iniciaron su labor de evangelización. A lo largo del siglo XVI, la provincia dominicana de Oaxaca logró fundar cuatro vicarías en la región, y para finales del siglo se había logrado la congregación y cristianización de la mayor parte de los pueblos.A lo largo de la Colonia y hasta el siglo XIX, debido posiblemente a su poca importancia económica y a su inaccesibilidad, el territorio mixe no fue tomado en cuenta por los conquistadores y permaneció ajeno a los movimientos sociales más importantes, y no fue sino hasta la Revolución de 1910 cuando la lucha por la autonomía de Oaxaca involucró a participar en la vida política del estado.En nuestros días la etnia se encuentra inmersa en la problemática general del país, y específicamente en la del estado de Oaxaca. La migración en búsqueda de alternativas económicas es significativa y la deserción hacia los centros de desarrollo es un fenómeno tan común que algunos poblados quedan prácticamente abandonados al emigrar temporalmente sus habitantes.Los mixes de la zona fría cultivan principalmente maíz y frijol en sus tierras de temporal; en algunas poblaciones de clima intermedio o cálido siembran también chile, tomate, calabaza y papa; sin embargo, debido a la dificultad para comercializar estos productos su distribución queda en manos de intermediarios. Desde el punto de vista económico los cultivos más importantes de este pueblo son el café, que le permite un ingreso significativo, y el barbasco, planta silvestre que crece en abundancia y que se vende a la industria química para la producción de hormonas.Es importante hacer notar que entre los mixes se conserva todavía una organización religiosa tradicional basada en el sistema de cargos que se inicia con el topil hasta alcanzar el más importante: el mayordomo. El alto costo que significa el ejercicio de ciertos cargos solamente permite su desempeño por un año, a pesar de que en algunos casos la elección es por tres. Los cargos políticos como topiles, policías, cabo mayor de vara, mayores, comandante, regidor de vara, síndico, presidente y alcalde, se intercalan con los religiosos, siendo un requisito importante para el ascenso político el haber desempeñado rigurosamente los puestos escalafonarios. Sin embargo, esta situación ha cambiado en los últimos años debido a la aparición de grupos protestantes que han interferido en las actividades y ceremonias del ritual tradicional y católico. Asimismo, la actividad política se ha visto influida fuertemente por los diferentes partidos, los cuales ahora nombran a los puestos públicos.Decía Alfonso Villa Rojas en 1956 que dadas las condiciones en que por siglos han vivido los mixes, sus usos, costumbres y creencias se encuentran saturados de supervivencias prehispánicas. El culto a sus deidades se mantiene vigente: los dioses del viento, de la lluvia, del rayo y de la tierra se mencionan con frecuencia en las oraciones y ceremonias que realizan en lugares sagrados como cuevas, cerros, manantiales y rocas de formas especiales, mismas que se consideran representaciones de alguna deidad, o por lo menos residencia de la misma.Las ocasiones para realizar ritos y ceremonistas son múltiples, pero de manera preponderante ocupan la atención religiosa de los mixes los actos que marcan el ciclo de vida, aquellos que ocurren desde que nace hasta que se muere, así como los que tienen conexión con el ciclo agrícola. Es de interés hacer notar que el grupo de los pocos en México que aún conserva un calendario ritual compuesto por 260 días con meses de 13 días y cinco considerados como nefastos, cuyo conocimiento y manejo está en manos de especialistas, adivinadores y “abogados”.La músicaUno de los rasgos más sobresalientes de la cultura mixe es su sentido musical; en las ejecuciones de música tradicional y mestiza los integrantes de las bandas mixes manifiestan todo el sentimiento de su etnia.Desde la época prehispánica el uso de instrumentos de viento y percusión era ya tradicional entre los mixes. Los códices, la cerámica, los frescos y las crónicas nos dan noticia del tipo de instrumentos que utilizaban, y se sabe específicamente que cumplían una función religiosa, civil y militar. Sin embargo, la música sufrió también el impacto de la Conquista, y nuevos instrumentos como las trompetas, los tambores y pífanos, las arpas y las vihuelas se conjugaron con las chirimías, el huéhuetl, los caracoles y los teponaztlis dando lugar a nuevos sonidos.Oaxaca comparte la larga historia musical del resto de México, y los oaxaqueños son un pueblo amante de la música que ha dado magníficoscompositores. Es enorme la variedad en la música indígena de este estado; baste recordar la riqueza de temas, estilos y ritmos que se bailan en la Guelaguetza.Fue Porfirio Díaz quien se preocupó por desarrollar en su estado natal algunas de las mejores bandas, y encargó a Macedonio Alcalá –autor del valsDios Nunca Muere,himno oaxaqueño por cierto-, la dirección del Conservatorio y la instrucción musical pública. Las bandas indígenas alcanzaron entonces su máximo esplendor y aún juegan un papel muy importante en las comunidades de los estados de Oaxaca, Morelos y Michoacán.La música ha llegado a alcanzar extraordinaria relevancia entre los mixes; existen pueblos de la zona donde los niños aprenden primero a leer música que palabras. En algunos de ellos la comunidad entera presta su ayuda para que la banda sea la mejor de la región, pero como los recursos son muy escasos no siempre se puede contar con instrumentos nuevos o dar mantenimiento a los ya existentes. Por ello, no es raro ver instrumentos reparados con ligas de hule, pedazos de madera, hilos, parches para llantas de bicicleta y otros materiales. El repertorio de las bandas mixes es muy amplio y una gran parte de él lo forman expresiones musicales como sones, jarabes y música de otras regiones del país, aunque también interpretan obras de carácter académico como valses, polkas, mazurcas, pasos dobles, trozos de óperas, zarzuelas y oberturas. Actualmente, hay varios jóvenes mixes estudiando en el Conservatorio de la ciudad de México con una capacidad reconocida e indiscutible.Fiesta de muertosEl ciclo de vida culmina con la muerte y los mixes consideran que esta última es sólo un paso más en la existencia, y por ello deben realizarse algunas ceremonias. Al ocurrir el deceso, en el sitio donde se produjo los familiares del difunto hacen una cruz de ceniza en el suelo a la que rocían con agua bendita y que permanecerá allí varios días. Los velorios se alumbran con velas, porque ellos piensan que su luz ayuda a las almas a encontrar su camino; se reza durante toda la noche y se ofrece a los asistentes café, mezcal y cigarros. La muerte de un niño es motivo de regocijo y en algunos pueblos bailan toda la noche pues suponen que su alma ha ido directamente al cielo.Al acercarse el mes de noviembre se inician los preparativos para la colocación de las ofrendas con que los mixes rinden culto a sus antepasados, los agasajan y esperan para compartir con ellos los frutos de la cosecha y del trabajo. Esta tradición que se repite anualmente, está impregnada del sabor de lo antiguo, y en esta zona tiene características especiales.Entre la espesa neblina de las montañas, en las frías mañanas de finales de octubre, las mujeres caminan presurosas para llegar al mercado y adquirir todo lo necesario para la ofrenda: amarillos y frescos cempasúchiles, roja e intensa mano de león, velas y veladoras de cera y sebo, aromático copal, naranjas, dulces manzanas y perfumadas guayabas, cigarros y tabaco de hoja. Con tiempo hay que ir granando el maíz, preparando la masa para los tamales, encargando el pan, eligiendo las imágenes, lavando los manteles y adecuando los espacios, siendo el idóneo una mesa grande en la habitación más importante de la casa. También los músicos se alistan; cada instrumento es tratado con respeto, se limpia y pule para tocarlo en la fiesta, pues con cada nota emitida se restauran los lazos de parentesco y se establecen las bases de la relación de los vivos con los muertos.El 31 de octubre el altar familiar debe estar ya adornando con flores y velas, perfumando con copal y con los alimentos, las bebidas las frutas y objetos que fueron del gusto de los fieles difuntos. Mención aparte merece el pan, decorado con flores de azúcar en variados colores, caritas de ángeles maquilladas con anilina y boquitas pintadas de rojo intenso y formas geométricas en las que se expresa toda la creatividad de los panaderos. Esta noche es de recogimiento; sólo el crepitar de los carbones donde se quema el copal rompe la paz.Es de interés resaltar que los mixes son de los pocos grupos que aún conserva un calendario ritual compuesto por 260 días, con meses de 13 días y cinco considerados como nefastos.Aunque en nuestros días la etnia mixe se encuentra inmersa en la problemática general del país, todavía conserva intactas muchas de sus tradiciones ancestrales.El primer día de noviembre se sale a las calles a buscar a los familiares, se invita a los compadres y se les ofrece caldo de gallina humeante y apetitoso para combatir el frío, así como tamales de frijol recién hechos, tepache y mezcal. Se hacen recuerdos, lamentos, bromas sobre los parientes difuntos, y quizá algún familiar se ponga triste y surja el comentario: “su alma es difícil que venga a esta fiesta porque se quedó a cuidar su casa en elmucu amm(nombre dado por los mixes al infierno), allá abajo en el centro de la tierra. Este comentario refleja la concepción del mundo, la cosmovisión del grupo: todavía sitúan el inframundo en el centro de las tierra como se hacia en la época prehispánica.El día de Todos Santos, se tienen listos los tamales enrollados, los tamales amarillos de carne de res, pescado, rata, tejón y camarón; tres o cuatro ollas de tepache de 80 litros; una o dos latas de mezcal, muchos paquetes de cigarros y tabaco de hoja. La fiesta durará ocho días y las bandas se aprestan a tocar en la iglesia y en el panteón la música elegida por los deudos. Limpiar las tumbas y adornarlas es una tarea sagrada; el ambiente de la zona se presta para la devoción: la bruma se extiende sobre la población mientras un músico solitario toca la trompeta en camino apenas recorrido. En la iglesia la banda toca incesantemente mientras que en el panteónhay más actividad: el gris de las tumbas y la tierra seca se empiezan a teñir en el amarillo brillante de las flores y las fosas se decoran dejando volar la imaginación para construir un sitio digno para los difuntos.Los niños imitan, tocan en las bandas infantiles, se contagian de las antiguas costumbres e inician su aprendizaje yendo de casa en casa comiendo las ofrendas: recetas ancestrales preparadas por las hábiles manos de sus madres y abuelas, guardianas de la tradición, reproductoras de la cultura, manos indígenas que año con año ofrendan y agasajan a sus muertos.Fuente: México desconocido No. 213 / noviembre de 1994

AYUUK JA AY

MIXES / AYUUKJÄ'ÄY

Del nombreLos mixes se llaman a sí mismos Ayuukjä'äy. La lengua que hablan es ayuuk que es el nombre con que históricamente se conoce al grupo. La palabra ayuuk está compuesta de los siguientes morfemas: a = idioma, palabra; yuuk = montaña, florido; y yä'äy = gente, muchedumbre. Por lo tanto, su significado es "gente del idioma florido".Según la tradición oral, la palabra mixes es una corrupción del vocablo mixy (varón-hombre), al que se le agregó el plural "es". Otros piensan, que mixes pudo haber surgido de la dificultad de los españoles de pronunciar el vocablo original.LocalizaciónLa región mixe se encuentra al noreste del estado de Oaxaca. Colinda al noroeste con los ex distritos de Villa Alta; al norte con Choapam y con el estado de Veracruz; al sur con Yautepec y al sureste con Juchitán y Tehuantepec. El territorio abarca una superficie total de 4 668.55 km2.La topografía es accidentada, se pueden encontrar varios microclimas en un espacio geográfico reducido. La región ayuuk ha sido dividida en tres zonas climáticas: alta o fría, con altitudes superiores a los 1 800 m, media o templada, con alturas de 1 300 a 1 800 m, y baja o caliente que se localiza desde los 35 m hasta los 1 000 msnm.La región tiene un total de 19 municipios: la zona alta está integrada por Tlahuitoltepec, Ayutla, Cacalotepec, Tepantlali, Tepuxtepec, Totontepec, Tamazulapam y Mixistlán; la zona media por Ocotepec, Atitlán, Alotepec, Juquila Mixes Camotlán, Zacatepec, Cotzocón, Ouetzaltepec, e lxcuintepec y la zona baja por Mazatlán y Guichicovi.InfraestructuraLa mayoría de los municipios correspondientes a la zona alta, se encuentran comunicados por carretera y brechas de terracería.Los caminos de la zona media son de terracería. La zona ístmica o baja es la mejor comunicada, pues su acceso es por carretera asfaltada.El transporte desde la ciudad de Oaxaca se realiza con autobuses de segunda clase. Por otro lado, parte del territorio se ve favorecido por el ferrocarril transístmico. El único río navegable en la región es el Jaltepec.El Instituto Mexicano del Seguro Social, el Instituto Nacional Indigenista y algunas instituciones religiosas son las que actualmente cubren el servicio de salud al pueblo mixe.Antecedentes históricosLa hipótesis más aceptada hasta el momento sobre el origen del grupo es la del investigador George Foster, que coincide con la filiación lingüística propuesta por Swadesh y que vincula al mixe-zoque-popoluca-tapachulteco con el tronco macro-maya. Esta hipótesis sugiere que los mixes debieron haber ocupado una franja del Istmo de Tehuantepec.A mediados del siglo XVI, los españoles utilizaron como táctica de conquista, la evangelización, ésta estuvo a cargo de los dominicos, quienes fundaron vicarías en lugares como Villa Alta, Totontepec y Najapa de Madero, en esta localidad introdujeron un Cristo negro en su centro ceremonial.En 1938 se estableció oficialmente el distrito mixe, y el municipio de Zacatepec como cabecera de las autoridades judiciales y hacendarias. A partir de este nombramiento, se han presentado en la región serios conflictos políticos originados por cacicazgos locales. También se han presentado luchas violentas debido a conflictos agrarios.LenguaLa familia lingüística mixe-zoqueana está integrada por el mixe (ayuuk), el zoque y el popoluca; aunque hay quienes incluyen el tapachulteca (lengua extinta).Entre los ayuuk jä'äy existen variantes dialectales inteligibles entre sí; sin embargo, cada pueblo dice hablar el ayuuk "más correctamente".SaludPara los mixes, la salud es resultado del equilibrio y armonía, del buen comportamiento, así como del respeto a las deidades ancestrales y cristianas.Entre los ayuuk existen tres tipos de enfermedades: las de origen "natural" como empacho y estreñimiento; las de origen "sobrenatural" que se cree surgen por el desequilibrio del hombre con la naturaleza y con la sociedad (ejemplos de estas enfermedades son "el mal de ojo", "la tristeza", las enfermedades adquiridas a través del sueño, etcétera). En estos últimos casos los enfermos acuden con los especialistas de la medicina indígena; en tercer lugar están los padecimientos que no tienen un origen causal "bien definido" como son el alcoholismo crónico, el tabaquismo y la drogadicción.Las cinco principales enfermedades que se presentan entre la población mixe son: infecciones respiratorias agudas, amigdalitis, infecciones intestinales, amibiasis y ascariasis. Estas enfermedades se agravan por el alto índice de desnutrición que prevalece entre la población.Para iniciarse en la práctica médica, los terapeutas indígenas afirman que los candidatos deben pasar por una serie de pruebas enviadas por Dios, así como aprender las técnicas curativas a través de visiones y sueños. Dentro de los especialistas tradicionales encontramos "limpiadores", "yerberos", "sobadores" "hueseros", "chupadores", "culebreros", "comadronas", "hechiceros" y "rezadores". Dentro de estos especialistas, destaca la figura del xëëmapyé (sacerdote lector del calendario), quien es consultado para saber acerca de la suerte y el destino.ViviendaLa vivienda tradicional, construida con techos de palma, de dos aguas, paredes de tabla o bajareque y piso de tierra, ha ido desapareciendo a un ritmo muy acelerado. Actualmente, las casas son construidas con paredes de adobe, block, ladrillo y piedra, techos de teja, lámina galvanizada, de asbesto o de concreto y pisos de cemento.La casa-habitación es, por lo general, de forma rectangular. Tienen un espacio destinado a la cocina-comedor y uno o dos cuartos como dormitorios, almacén o estancia. La mayoría de las viviendas cuentan con un patio y/o traspatio destinado al cultivo de algunos árboles frutales, plantas de ornato y medicinales, y un espacio más para los animales de carga. La falta de drenaje y agua entubada son dos de los principales problemas a los que se enfrentan los ayuuk.ArtesaníasLa música puede considerarse como la principal actividad artística que cultivan los ayuuk. En cuanto a artesanías, podemos encontrar el telar de cintura, el cual se ha mantenido en Tamazulapam, Tlahuitoltepec y Cotzocón; mientras que Mixistlán, Tamazulapam y algunas rancherías de Ayutla, se caracterizan por la producción de alfarería.Territorio ecología y reproducción socialEl territorio ayuuk abarca una extensión de 4 668.55 km. La agricultura que se practica es de subsistencia. En las zonas altas y frías se siembra papa, maíz, frijol y calabaza; en las zonas templadas y cálidas, maíz, frijol, camote, caña de azúcar y chile; en la zona central y baja, café y cítricos. Para labrar la tierra algunas localidades se auxilian de la coa, el azadón, el machete y la yunta.Algunas de las especies que se encuentran en peligro de extinción son el venado cola blanca, el tapir, el jaguar y el jabalí; en tanto que el tejón, el armadillo y el temazate, aún subsisten.La zona media y baja cuentan con el río Jaltepec que es navegable, así como con el río del Sol, que atraviesa al municipio de Guichicovi. El producto de mayor comercialización en la región es el café.La mayoría de los municipios mixes están considerados con categoría migratoria de fuerte expulsión, los más importantes son Cacalotepec, Cotzocón y Guichicovi; Tamazulapam está catalogado como de equilibrio; Mixistlán, Camotlán y Alotepec, como zonas de atracción. Los principales polos de atracción de los migrantes son la ciudad de Oaxaca, el Distrito Federal y Estados Unidos. El fenómeno migratorio se acentúa principalmente en periodos en que la situación económica es crítica en las comunidades.Organización socialLa institución básica es la familia nuclear, aunque en la zona alta también se da la familia extensa; el matrimonio por lo general es monógamo, con residencia patrilocal, es decir, la pareja va a vivir a casa de los padres del novio. La herencia se otorga al contraer matrimonio, al adquirir la mayoría de edad o cuando mueren los padres. El hombre es quien por lo regular tiene derecho sobre la tierra.Las autoridades tradicionales constituyen el gobierno indígena, que aún tiene fuerte presencia en la zona alta y media de la región. En la zona baja, las estructuras tradicionales se han debilitado, sin embargo, la mujer mixe ha ido conquistando espacios políticos dentro del Cabildo.El consejo de ancianos desempeña varias funciones en la comunidad: buscar a las personas que no han prestado servicios al pueblo, mediar en los litigios de tierra, vigilar la buena conducta de la gente, etcétera.Dentro de los cargos, estructurados jerárquicamente, encontramos: campanero de iglesia, topil, alguacil, policía, mayor, síndico, capitán de banda, mayordomo, secretario, presidente y alcaide.Para los mixes, los cargos sociales son muy importantes, pues a un individuo le puede ser negada la voz y el voto si no ha desempeñado funciones que la sociedad le haya asignado.Como servicio que se presta a la comunidad existe el tequio, trabajo colectivo, obligatorio y gratuito, que se presta en obras de beneficio colectivo.Cosmogonía y religiónEl individuo está formado por dos "almas", una mortal y otra inmortal tso'ok (tona, tonalli), que corresponde a la visión indígena. La tona tso'ok se adquiere cuando coincide el nacimiento de un individuo y el de un animal, por lo que tona e individuo correrán durante toda su existencia suertes paralelas. Para conocer la tona del recién nacido, se recurre a consultar el calendario ritual y la lectura de la ceniza. Las tonas están clasificadas en "fuertes-buenas", poseídas por los curanderos, las "fuertes malas", características de los brujos y las "débiles" (buenas o malas), poseídas por el común de los mortales. El calendario ritual también llamado tonalamatl es consultado para conocer la suerte o destino de las personas. La consulta del tonalamatl se hace con granos de maíz colorado, los cuales se dejan caer sobre un petate y el especialista se encarga de hacer la lectura correspondiente. Otro tipo de calendario es el agrícola que consultan los más ancianos para conocer las condiciones meteorológicas que prevalecerán durante los próximos doce meses.La religión que practican los ayuuk es resultado de la mezcla sincrética de la indígena y la católica. Actualmente se pueden observar ceremonias, donde se hacen invocaciones a los dioses antiguos, mezcladas con oraciones cristianas en ritos de fertilidad, mortuorios y de curaciones.FiestasEl sistema de fiestas de la región mixe es importante por varias razones: se celebran eventos de carácter religioso cristiano en honor a un santo patrono en donde generalmente subyace un culto prehispánico; vinculan y refuerzan los lazos de unión entre localidades, genera el ascenso social al interior de la comunidad al desempeñar cargos (como son las mayordomías) y, por último, propicia el comercio e intensifica las relaciones sociales interregionales.Las fiestas que se celebran en la zona alta y media de la región ayuuk se caracterizan por el enfrentamiento entre diversas bandas en "duelos musicales". Las danzas cumplen funciones de integración comunitaria. Los carnavales permiten el relajamiento social del grupo; finalmente encontramos las peregrinaciones, que por lo general se realizan al exterior de la región a sitios sagrados como Santa Catarina Albarradas, San Pablo Güila Tlacolula, Otatitlán, en Veracruz y a visitar el Cristo negro de Esquipulas en Guatemala.Relaciones con otros pueblosLas relaciones del grupo mixe se desenvuelven en cuatro planos: cultural, social, económico y político.Los pueblos de la zona norte, que colindan con los zapotecos de Villa Alta y con algunos chinantecos, desarrollan sus relaciones a nivel comercial; mientras que otras comunidades, también de la parte alta y que colindan al sur y suroeste con zapotecos del Valle, interactúan con sus vecinos en el plano religioso y económico; los municipios ubicados en la zona media o centro tienen fuerte interacción en el orden religioso y de parentesco ritual con los zapotecos de Yautepec y del Valle
Los pueblos de la zona baja reciben influencia cultural por parte de los zapotecos del Istmo, así como de algunos pueblos mestizos que colindan con el estado de Veracruz.La apertura de brechas en la región ha permitido estrechar relaciones comerciales básicamente con los zapotecos, quienes son el grupo dominante en la zona.
VERSIÓN ORIGINAL: LAUREANO REYES GÓMEZSÍNTESIS: GLORIA ISIDRO MORALES

EXPULSADOS POR LA MODERNIDAD

Mixes, expulsados por la “modernidad”
Nydia Egremy
Sección: Marginación y Pobreza

Los municipios de la zona alta mixe son grandes expulsores de migrantes por la baja productividad local. Sus habitantes olvidan su idioma por temor a la discriminación
Oaxaca. San Pedro Ayutla, Santo Domingo Tepuxtepec y Tamazulapan son tres municipios situados en la zona alta mixe de Oaxaca en donde la migración de los jóvenes, la pérdida de su idioma y del tequio –la práctica del trabajo voluntario– constituyen una amenaza contra la identidad de este grupo indígena, denuncian los alcaldes de esa región.
Los 19 municipios mixes de Oaxaca ocupan una superficie total de 4 millones 668 mil 55 kilómetros cuadrados, de acuerdo con cifras de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas. Están divididos en la zona alta con Tlahuitoltepec, Ayutla, Cacalotepec, Tepantlali, Totontepec, Tamazulapam y Mixistlán; la parte media con Ocotepec, Atitlán, Alotepec, Juquila Mixes Camotlán, Zacatepec, Cotzocón, Ouetzaltepec e lxcuintepec, así como la zona baja con Mazatlán y Guichicovi.
Una gran mayoría de mixes abandonan sus municipios en busca de empleo. Los reciben polos de atracción de mano de obra barata como: la ciudad de Oaxaca, Puebla y Distrito Federal. En Estados Unidos, la comunidad oaxaqueña los acoge en California y Wisconsin.
Arnulfo Jiménez Ojeda, munícipe de Tepuxtepec, exhibe con orgullo el avance del proyecto comunitario destinado a retener a los pobladores a través del cultivo de jitomate en invernadero. “Es para el autoconsumo porque los comerciantes lo venden muy caro”, indica.
A su lado, la agrónoma Micaela Nolasco –una joven de baja estatura y voz enérgica– explica que desde 2004 se fundó la empresa Agroproductores de Tepuxtepec para atraer los recursos agrarios federales y estatales en beneficio de los campesinos de la zona.
Micaela y Mari Luisa López explican que en ese municipio, la migración de los jóvenes mixes va en aumento. “Migran hacia las grandes ciudades por falta de empleos en sus municipios y trabajan como empleadas domésticas o albañiles; entonces, reniegan de su lengua porque son discriminados. Cuando regresan, no quieren enseñar a sus hijos este idioma”.
Tepuxtepec es un municipio rico en agua, como señaló el ingeniero de la Comisión Nacional del Agua que trabaja en la última fase de la ampliación de los tanques receptores del líquido en esa zona. Para realizar esas obras de infraestructura, esa dependencia contrata al 50 por ciento de empleados de los municipios con objeto de brindar más ingresos a la población local.
Éxodo y olvido
San Pedro y San Pablo de Ayutla Mixe no figura como uno de los municipios más pobres de Oaxaca. Tiene casi 8 mil habitantes. Su paisaje –cuya vegetación está conformada por pino-encino, ocote, madroño y capulín– está dominado por tiendas de materiales de construcción, de abarrotes y prendas de vestir.
Por las calles pavimentadas y algunas vías de terracería circulan a alta velocidad las camionetas pick up de modelo reciente así como camiones de redilas que rebosan con mercancías traídas desde la capital del estado. No hay, sin embargo, ninguna radio local o señal para teléfono inalámbrico.
Anacleto Julián Sánchez, actual munícipe, lamenta la pérdida de la práctica del tequio –trabajo colectivo por tres días–, el uso de su idioma y la vestimenta. Sin embargo, subraya, aún persiste en la comunidad la costumbre de decidir los asuntos públicos a través de las asambleas, como la designación de un alcalde o su reelección (pues su periodo de gobierno es de apenas un año).
Sin embargo, este gobernante se lamenta: “Desde que empezó a llegar el dinero del gobierno estas costumbres se han perdido: los jóvenes ya se acostumbraron a ganar dinero, la juventud quiere que hoy trabaje y mañana le paguen, no quieren sufrir en su propia comunidad. ¿Qué trabajo podemos crear?”.
En Ayutla y en los otros municipios mixes hace falta más organización frente a la baja producción del campo, considera Anacleto. Opina que el fracaso de los proyectos gubernamentales radica en que: “Cuando los proyectos se echan a andar sí hay asesoría, pero desgraciadamente sólo es por unos días y luego se retiran los asesores; por eso muchos programas fracasan y van a la quiebra”.
Esa fallida política en los programas productivos en las zonas pobres de Oaxaca, tiene su expresión más evidente en el poblado de San Baltasar Segache El Bajo. Situado entre Ixtlán de Juárez y Natividad, a unas cuatro horas de la ciudad de Oaxaca, es un poblado “muy bonito, muy limpio pero vacío, no hay nadie. Apenas 25 o 30 personas; es una zona de muy alta expulsión de migrantes”, narran los munícipes mixes.
También en la zona alta, a 40 minutos de Tepuxtepec y siguiendo un amplio camino de terracería, está Tamazulapan con casi 6 mil habitantes con casi el 85 por ciento de población mixe. Como su vecina Ayutla, también es un intenso eje comercial con programas para cultivar jitomate y elaborar artesanías.
El mixe en peligro
“La palabra mixe no tiene una traducción en nuestro idioma; los estudiosos la atribuyen a la relación comercial entre los zapotecos y los nativos de esta región, pues en zapoteco el vocablo mich equivale a muchachos, y así llamaron a nuestros antecesores”, apunta el profesor salesiano Carmelo Reyes.
Son varias las posibles causas del abandono de este idioma: en principio, que el mixe posee tantas variantes que es difícil que las comunidades se comprendan entre sí. Además, las familias migrantes lo dejan de usar por temor a ser discriminadas. Ante esa amenaza, el profesor Reyes señala que “hay esfuerzos tibios y poco consistentes por preservar el idioma mixe”, como los del Instituto Nacional de las Lenguas Indígenas para preservar sus variantes dialectales como una riqueza cultural.
Diálogo extramuros
La caravana de cuatro decenas de profesores y estudiantes de la Facultad de Estudios Superiores Zaragoza de la UNAM, llega a Santo Domingo Tepuxtepec. Ahí, tiene lugar un diálogo bilingüe entre dos culturas –a veces antagónicas y otras paralelas– en pos de la salud dental de los mixes.
Esa mañana, el altavoz público de Tepuxtepec, llama a los pobladores a acudir a la consulta. Lentamente ocupan su lugar tímidas mujeres con sus hijos. Otras, ya mayores y cuyas cabezas coronan rebozos multicolores, esperan su turno junto a un par de adultos.
“¿Qué edad tiene?”, “¿qué come?”, “¿qué enfermedades padecieron sus padres?”, preguntaban los doctores en español. Las respuestas en mixe llegaban de sus pacientes auxiliados por el maestro Carmelo Reyes.
Laura Mecalco, coordinadora del grupo, atiende a un anciano al que una gran carnosidad cubre su ojo izquierdo. “Es efecto de la tierra y la resequedad del clima; unas gotas lubricantes le ayudarían a aliviar la molestia”, explica. Más tarde, examinará a un niño de apenas tres años con sarna: “Aquí una crema sería lo indicado y mejores condiciones de higiene”.
Al anochecer de la primera jornada, aún rodeada de pacientes, la doctora hace un primer diagnóstico: “La realidad superó nuestras expectativas; aunque veníamos preparados con equipo y medicamentos, la falta de una cultura preventiva ocasiona problemas para los que no es posible, en tan poco tiempo, atenderlos como requieren”.
Este viaje fue posible por los excedentes de la atención pública de la Facultad de Estudios Superiores Zaragoza de la UNAM. Parte de los analgésicos y medicamentos contra enfermedades infecciosas fueron donados por Laboratorios Senosiain. De su experiencia, dice una joven doctora: “El problema es la barrera de comunicación; además ¿cómo van a gastar dinero en comprar una pasta, hilo dental o cambiar cada tres meses un cepillo dental si no tienen recursos?”.

DATOS GENERALES DE AYUTLA

http://www.inafed.gob.mx/work/templates/enciclo/oaxaca/municipios/20337a.htm

07.03.2024