martes, 16 de abril de 2024

16.04.2024


 

 

 Quiero un beso tuyo, que sea hijo de tus suspiros. Del mar ignoto que hay en la calma ferviente de tus ojos. Quiero un beso tuyo que amanezca en el trinar cardumen de jilgueros, y la sombra de árboles azules. Quiero un beso tuyo con la destreza del leopardo y se encienda en el despertar del tigre que lame la neblina. Quiero un beso tuyo que fragüe tormentas y luciérnagas y atempere está sed de siglos de tus besos. Quiero ese beso tuyo que acompase esa melancolía verde, inacabable, inabordable como esas lunas que suelta la lluvia.


Xabo Martinez

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

lunes, 15 de abril de 2024

15.04.2024

 

 

 

 

 

 

 


 

Le escribo al dios de tu pelo. Escribo cartas para que germinen en tus cabellos y resurjan en claves de sol, en hojas de menta, en hojas doradas por la miel del atardecer. Y que tu cuerpo se inunde de reflejos de piano, de filamentos azules, como el agua que corre transparente a través de un bosque sepia. Encontrar ahí el origen de la música y de tus manos coralinas. Ocultarme en tu sombra y entonar una sinfonía en verde, junto a la lluvia que cae melancólica en tu regazo.

Xabo Martinez

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

viernes, 12 de abril de 2024

12.04.2024

 

 


 

En una mano el aire,
en otra la neblina.
En el corazón la llovizna,
los párpados de liquen
y el musgo que teje heridas,
sobre el manto de piedras: los hombres.
Un país cuya infancia fue un patio de humo.
Una caravana que camina y habla en mixe,
enciende un ocote para alumbrarse.
Se bebe un mezcal para el camino,
en la mirada un horizonte de reses muertas.
Cerca de los tejados de adobe, chivos expiando su pena.
El canto de los naguales en el puente azul.
Un arroyo con sueños de agua,
con voz de nísperos rojos.
Atardecer de duraznos priscos y una pared encalada.
En el cielo nada parece ser distinto,
a esta Ayutla que se levanta
entre patios de niebla y albura.
Que entierra con música a sus muertos.
Responso por el mecapal
y el hacha que se queda en silencio,
cuando el encino abre su pecho,
y muestra en su sello la urdimbre del ser mixe.



Xabo Martinez

jueves, 11 de abril de 2024

11.04.2024


 

 

 

  Hoy amanecer en ti hace que el mundo sea cielo de palomas. Cielo de nubes y el sentido del mar es el vaivén de tus caderas. El mundo persiste si tú persistes, si tu corazón juega a ser el río de almendras.   La luna que se desnuda y se baña en el mar cuando las olas se abren y te desperdigas en vuelo de mariposa o luciérnaga. El beso del colibrí que inserta la miel y se espiga en su corteza amarilla.  Derrama girasoles a su paso.  El mundo se abre en tus sentidos y tú eres el sentido del mundo.

 

Xabo Martinez

 

 

 

 

 

 

miércoles, 10 de abril de 2024

10.04.2024

 

 

 

 

 


 

 

Lento lento beso tu cuello. Arribo a ti; al eco de tu voz. Al nido en que tu voz: tan tú, se cuela en los párpados del mundo.

Xabo Martinez

martes, 9 de abril de 2024

09.04.2024


 

 Llegas y te disgregas al paso del otoño. Vuelas en remolino cual finísimos dientes de león desperdigados en la yerba. A través de ellos la luz tocándolos los conmueve, los hace invisibles, mas no por ellos menos angustiantes, como el sendero de un camino al que conduce un mar en el que has estado de frente al horizonte con un cerco de espuma. Peces de hilo entonces han jugado en tus pies, han buscado calmar tus huellas de mujer que se bebió de frente los silencios y ahora ante la noche, una sombra de medusa, apenas se dibuja. Y eres tú, la que abre los brazos al mar, la que nada en el vértigo de la media luna, llegando por fin al azul intenso qué habito tus sueños.

Xabo Martinez

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

viernes, 5 de abril de 2024

05.04.2024

 

 


 

 

 Si, los amantes. Los que van escondiéndose entre sombras, Si; el alcohol que evaporan entre brazos, piernas, muslos, miradas. Si, nosotros: los que amamos y cantamos para nadie. Si, la tibieza de los cuerpos: el alma. Bebemos deseo y nacemos con el sol en fuga. Transito lento, lengua y labios: nombrando a oscuras la rosa, el parpadeo de miel, la albura. El jinete blanco que bebe sombras, el aliento de la noche en tu cuello. En tu espalda, el camino de nadie, el sabor a sal. El desconcierto de la luna cuando en mis brazos tiemblas, y escondes en tus pupilas lo imposible: la unión del lobo y la noche. El arco y la flecha: los amantes. Si; tus labios y la ternura en la memoria de las uvas que no fuimos.

 Xabo Martinez

16.04.2024

     Quiero un beso tuyo, que sea hijo de tus suspiros. Del mar ignoto que hay en la calma ferviente de tus ojos. Quiero un beso tuyo que am...